¡Qué triste! Encender el televisor, leer el periódico, o simplemente salir a la calle, y darse cuenta de todo lo que te rodea: un estado político podrido y corrompido por ansias de poder, pero que se venden con la idea de progreso de la sociedad; una enorme crisis económica de la que por más que intentemos no logramos salir; una tasa de desempleo increíblemente alta…
Muchos crearan que me refiero al actual estado, y lo cierto es, que si bien se asemejan, hablo de los años ochenta, una década marcada por la transición, crisis económica, el agravante consumo de drogas en jóvenes, etc. que fueron aún más notables en el País Vasco.
nte a la sociedad ochentera tan atroz, los jóvenes vascos plantearon la música como el medio más adecuado para reivindicar, evadirse del mundo, mostrar su rabia… en definitiva, expresarse.
Así, empezaron a conocerse grupos, hoy míticos, como Hertzainak, Barricada, Kortatu o La Polla Records, por poner algunos ejemplos. Estos, surgieron contra el carácter intimista y melancólico de las canciones protesta de cantautores, del tipo Mikel Laboa o Xabier Lete, y en su lugar, llenaron la música de agresividad. A primeras, estos grupos no creyeron tener nada en común, pero pocos años después, se vincularían por la etiqueta “Rock Radical Vasco”.
Resulta paradójico, que si bien, surgieron en contra de estos cantautores, los grupos RRV jamás rechazaron el hecho de cantar canciones protesta, lo que de cierta manera, deja al descubierto la influencia, quizá indirecta, de los cantautores. A medida que avanzó el tiempo, el panorama mejorando, y el sonido RRV se fue amainando, conociendo nuevos grupos como Gatibu, Esne Beltza, En Tol Sarmiento, etc.
En la actualidad, el sonido de los nuevos grupos parece haberse aterciopelado, perdiendo todo tipo de interés en esas canciones protesta, que tan típicamente vasco parece ser hoy. Desde luego, no será por escándalos políticos o por las crisis económicas, eso está claro. La cuestión es, que si estos grupos, como Huntza, son reconocidos, es porque han tenido éxito, pero solo durante un par de meses.
Quizá esto tenga que ver con que las canciones no trascienden a un nivel personal con el oyente, como lo hacía Kortatu, o Esne Beltza. Si bien se escuchan nuevas canciones, está demostrado, por una encuesta reciente de Spotify, que la mayoría de los jóvenes siguen prefiriendo grupos de la década de los noventa, como Gatibu.
Con todo esto, uno se plantea: ¿Dónde ha quedado el rock radical vasco? Tristemente, ya no queda rastro de él. Así que, joven compositor vasco, o no vasco, reivindico que regresen grupos como Hertzainak o Barricada, que ayuden a la ciudadanía en esta larga pesadilla llamada sociedad.
Aquí os dejo algunos videoclips del rock radical vasco:
A.A.
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